Mi primera cita con el CBCT

 

Mi primer taller de CBCT fue en 2016, en el Congreso de AEDE en San Sebastián de la mano de los doctores Borja Zabalegui, José Mª Malfaz y Roberto Aza.

En aquel momento no imaginaba que años más tarde se convertirían en mis profesores y mentores, compartiendo comidas y desayunos en Bilbao, amén de un amplio aprendizaje de endodoncia.

¿Y qué es el CBCT? Imagino que a estas alturas, muchos de vosotros ya lo conoceréis. Si no es así, este post puede ser vuestro punto de partida.

Si hablamos de escáner o TAC, todos sabemos a qué nos referimos y, aunque un CBCT no es lo mismo, sí se trata de un 3D.

Las siglas CBCT significan  Cone Bean Cumputered Tomography (tomografía de haz cónico). ¡Y no es lo mismo que un TAC!

A menudo es muy difícil hacer un buen diagnóstico con rayos X en 2D.

¡Tenemos un volumen 3D que pretendemos diagnosticar en 2D!

Por eso se hace imprescindible y fundamental tener un buen aparato 3D para casos como:

  • Traumatismos
  • Reabsorciones
  • Conductos calcificados.
  • Anatomías complejas.
  • Retratamientos
  • Fracturas

Como ENDODONCISTA, al plantearme la apertura de mi consulta, el 3D se convirtió en una herramienta fundamental para un buen diagnóstico y diseño del tratamiento, así como para tener un control en el éxito de ellos.

¡En Endodoncia no sirve cualquier aparato!

Necesitamos un campo y voxel pequeños y una resolución menor de 100 mm.

El aparato de nuestra consulta reúne todo esto, incluso para campos mayores para otras necesidades de tratamiento (ortodoncia, implantes…).

El CBCT se ha convertido en un imprescindible en mi día a día y me da seguridad en los diagnósticos, a la hora de saber qué hay ahí y me prepara para el trabajo que tengo que hacer después. Por eso, te brindo la oportunidad de que disfrutes de las ventajas que tiene este aparato y…

¡PONGO MI CBCT EN TU VIDA!